En la conquista de Algeciras, el 28 de Marzo de 1344 de manos de Alfonso XI, éste mando consagrar el edificio donde se ubicaba la Mezquita Mayor bajo la advocación de Santa María de la Palma. En ese mismo año se crea la diócesis de Algeciras por orden de Clemente VI, dotándola de un número determinado de canónigos. Quedó así la antigua mezquita convertida en la iglesia catedral de la ciudad. Con la destrucción de la ciudad en 1379, desapareció la antigua iglesia-catedral, pero con la repoblación del s. XVII, se hizo necesaria la construcción de un nuevo templo de culto cristiano que sería dedicado igualmente a Ntra. Sra. de la Palma. Las obras comenzaron en 1723, acabando 13 años después. En un principio, la iglesia constaba tan solo de tres naves, añadiéndosele las de las Ánimas y del Sagrario entre 1792 y 1795, quedando finalmente constituida por cinco naves mas el crucero. La nave central consta de cuatro tramos separados por arcos fajones. La cúpula central del crucero descansa sobre cuatro anchos pilares de base cuadrada, rematados con capiteles que imitan toscamente el estilo jónico. Fue entre 1795 y 1805 cuando se realizaron las últimas reformas con la magnífica torre, proyectada por Pablo Casaus que se ha convertido en el emblema de este templo.